lunes, 25 de julio de 2011

Potas, sin "U"




Tras un paréntesis de más de una semana reaparecemos en la orilla con ganas al zopilote mojado.

El calendario so-lunar de pesca indicaba para hoy, un día regular con una actividad media de los pejes... me da igual con tal de quemar al mono que llevamos dentro, ese Jekill disimulado que nos transforma nada más tocar el agua.

Dentro del agüita a horas inhumanas para algunos, solo la luz pública de la playa espantaba la oscuridad de la madrugada, una brisa refrescante que iba a más por momentos levantaba las olas con pijama blanco alborotadas por Eolo. Lanzaba distraído un aile naranja buscando a las lobas que acostumbran a apostarse en la ribera a esperar a los pezqueñines para desayunar, un chapoteo detrás de mi me sorprendió, estas jodías están detrás de mi pensé y fije la
mirada hacia el lugar, un chorro de agua casi me alcanza carajo.

Solo me faltaba eso, una meadita a modo de buenos díiiiias por parte del contrario, ilumino aquello y se muestra una pota dando los últimos aletos de su vida aun con fuerzas, la pongo en aguas para su defensa y se empeña en volver a suicidarse. OK, te hago una retratera y ahí te quedas.

Llega Florian puntual como siempre, la pota meona le sorprende y le inyecta bríos, el hombre se aposta a emboscar a las lobas que no están. Mientras esperamos la llegada de su amigo batimos despacio la orilla y me atrevo ahora si, a buscar a las puntactus.

No tardan en aparecer las de párvulo, hasta tres seguidas entran al
aile naranja esto se anima, Florian cambia el tercio y baila las olas a
su manera buscando pareja a su señuelo.
El mio ha de ser buen bailarín le entra otra puntactus, esta un poco mayor y peleona de barrio. Casi se traga el aile y cuesta extraer la potera.

Llega otro Spinner, Nicolás nada menos que de Suiza, un país sin salida al mar pero con ríos alpinos. El de la confederación denota que sabe manejar señuelos y no tarda en clavar una puntactus que devuelve a su hábitat. Solo está un rato con nosotros, otras obligaciones le reclaman, nos vemos.

... ¿Y Florian que hace? ha tenido varias clavadas sin fortuna, los pejerrey le han jugado una faena cuando tenía una baila casi en la orilla pero, insiste tanto que la suerte por fin cede en su favor y le permite clavar una puntactus que le hace sonreír de oreja a oreja, la retratera que no falte oiga ¿no es todo incluido? pues ea que no falte.
Volveremos.

domingo, 10 de julio de 2011

Nocturna II



Un coeficiente de 50 es decir medio, indicaba la información sobre la marea con una luna en creciente y el indice de actividad muy alto. Todo redondo para una noche de verano a spinning, solo que el tiempo es el tiempo y este no arrimó el hombro. Olas de 2.3 a 2.5 de altura en toda la costa desde el Inglés hasta la punta; pasada esta era mucho más fuerte. Las olas barrían con fuerza hacia el sur, dejando la orilla revuelta.

Con este panorama inicie la segunda parte de la jornada en solitario en el Inglés. Nada frecuente es encontrarte nada más entrar a los surferos, al mismo tiempo que bañistas, gente paseando... y como no, los colegas de Surf Casting. No hace mucho yo, era un radical de esta bonita modalidad. Con un gesto les salude continuando mi camino.

Todo pintaba muy bien, olas con arena en suspensión y espuma, solo una brisa suave sintonizaba ya el final de la tarde.

Comienzo a lanzar un Aile de 14 triple gris oscuro y lo que viene enganchado es ceba, me muevo lanzando y buscando fondos limpios, los encuentro lejos de la zona de inicio, los pejes sin colaborar.

La noche ya hacía rato estaba presente, la luna iluminaba con su cuarto mas crecido junto a la luz artificial de la playa. Cambio el Aile por otro de nueve, el arma secreta según Florian; pero ni eso atraía la felación de algún depredador.

Casi sin darme cuenta tropiezo con la gente de Surf Casting. Converso con ellos un momento y de paso les hago unas retrateras, se lo merecen también. Son miembros del club Alfaguara, creo recordar, que me disculpen si me equivoco. Ellos si tenían capturas, las propias de esta modalidad en su talla. Bailas y una herrera que recién capturada trataba uno de ellos de quitar el anzuelo; va por ellos este post.

Poco más tarde me doy por vencido y me despido de la orilla por una semana... al menos.

sábado, 9 de julio de 2011

Buenos díaaaas...


Siii bonito día a amanecido con una marea movida con olas, sin algas. No ha salido el sol aun y tiene buena pinta la orilla. La Prince engalanada con el Stradic 2500 y un pendiente de la marca... no me acuerdo, entro en el agüita salada reconforta el cuerpo y te entran ganas de hacer piiiiiii.

El sitio para empezar como cuando lees un libro es por el principio, primer capítulo "EL lugar del profe" a primer lance entra una baila que aun está casi en pañales ¡ños la cosa empieza bien! fotografía para la ficha y al agua. Segundo lance y trancon con... con dos coj; se marcho sin dejarse ver al menos me dejo más alicientes.

Sigo caminíto del segundo capítulo de la jornada "Donde la bandera arco iris". Cambio el tercio por un aile magnet uno de mis favoritos con él, llego lanzando sin resultados óptimos ya se nota el efecto de la corriente en las olas arrastrando hacía el sur. El aile se comporta y nada ofreciendo resistencia, lo que hace que sus movimientos en al agua sean atractivos y valla si lo fueron.

Otra pequeña baila entra al aile y según sale del agua la devuelvo, ¡lo siento, no es mi talla, que le vamos a hacer!

Tercer y último capítulo "Donde se te fue el grande viejo". Toda la semana con equipo semi pesado, lanzando popers y paseantes en busca de los saltatrix que están apáticos. Sospechamos que es la fresa, el amor vamos... ¿que pasa? también ellos se enamoran o ¿no?.

Esta mañana me lo han demostrado. Al levantarse una ola aparecen dos de ellos persiguiéndose, lo que faltaba, ¿jugando a que te cojo?.

Veo que ya hay humanos en la orilla y procedo a una retirada lenta, haciendo como el que no se quiere ir. De regreso voy haciendo paradas lanzando ahora una María kiis Me, si como lo leen, lo tiene grabado en lomo oiga, que quiere que le diga.

En esto que estoy en recuperación de la muestra cuando estalla el agua. A unos quinientos metros, donde no puedo llegar hay una fiesta de bonitos saltimbanquis, camino del norte. La retirada ahora es total y notable pero no derrotado, hago la última parada y como empece termino con otra baila de parvulario.

jueves, 30 de junio de 2011

Mi rincón favorito


Aprovecho que el alisio da una breve tregua y preparo los bártulos para pasar unas horitas junto a la marea.

Debido al emplazamiento del pesquero no tengo ni que madrugar. ¿Qué? ¿Como va ser eso?
Pues sí, todavía quedan sitios como estos en nuestra abarrotada y castigada isla a los que puedes acudir en horas más humanas.

Y esta vez tampoco iba a ser distinto.

"No hay moros en la costa". La cosa pintaba bien, por momentos al menos.
En los primeros lances mis expectativas se vieron mermadas ostensiblemente. Mucha alga suelta, demasiada. En cada lance alguna enganchada en los triples del minnow. No puede ser!
Aún así, quien se rinde tan rápido?

Obtengo la primera picada y tras un pequeño forcejeo asoma una bonita lubina.

Luego nada, una hora larga lanzando. Llega el primer visitante casi al medio día. La marea sigue bajando, tengo al fin la posibilidad de dar el salto a la arena y lanzar entre la ola con agua hasta la cintura. Esto es lo que mola, estar en primera línea, fundirte con el entorno y sentir el agüita salada que te empapa el cuerpo.
La segunda picada de la jornada no se hace esperar.

Allí, ya te lo dije. Allí se suelen mover, donde poca gente las supone. Las lubinas, bailas, los pejerrey y porqué no algunos otros pejes de la ictiología canaria.
El bicho al otro lado de la línea se defiende noblemente, algunos cabezazos, alguna carrerita pero al final se tiene que rendir.

Una negra cabezona lubina con cuerpo algo desproporcionado en cuanto su grande testa se deja varar no sin alguna dificultad.
Al amigo de enfrente se le dispara la alarma e intento ser lo más discreto posible.

Cambio la muestra por otra mas estilizada y de color natural.

Vaya, esta ha tardado lo que yo en lanzar y recoger. La prima pequeña de la otra. La agarro y la suelto sobre la marcha.

Por mucho que intento disimular, la acción no pasa desapercibida ante la mirada atenta del de la vara con plomo.

Ves, también están allí. Han tardado un poquito en salir pero están. Pensaba yo...
Ya no asomó ninguna, solo otra prima mayor de esa.

Me doy el último bañito, el sol aprieta y el cuerpo va cogiendo color. He disfrutado como un enano, recojo mis enseres, no sin antes liberar 2 de las lubinas que mantuve en un charco propicio, a la tercera, lo siento por ella, se le acabó su etapa.

No se crean que esto es pesca fácil, hay que currárselo. 4 pejes en 3 horas no es nada espectacular. ¿Pero que más da?

Lo que cuenta es pasárselo bien y disfrutar con lo poco que nos queda.
Respetar el entorno y preservar la naturaleza es el lema por el cual todos deberíamos guiarnos. El captura y suelta, como ya vienen diciendo algunos de los compañeros de pesca, tiene que convertirse en algo normal y habitual.

Y no me cuesta decirlo abiertamente. Hoy por hoy disfruto de igual manera cogiendo pejes que soltándolos.

A la primera que pueda volveré, tiene que quedar algún bichillo ahí, al menos los que liberé.
Marcus M.

miércoles, 29 de junio de 2011

Viejas estampas: El Pescador de morenas


Jo Morenita... Jo... repetía mi padre una y otra vez entre la piedras del marisco de Maspalomas, que habían quedado al descubierto en la bajamar de la luna llena o nueva. Por aquel entonces le gustaba mariscar y pescar en aquella zona riquísima de pulpos y morenas. Si no tenía mucho tiempo, echaba mano de su caña y de su carrete, lanzando lejos con bujías viejas que utilizaba en lugar de plomos, caros y difíciles de conseguir, pues no habían tiendas donde conseguirlos, salvo en la capital.

Sostenía con ambas manos un tubo corto de caña por el cual pasaba una "berguilla" que, asomando por el otro extremo, formaba un lazo en el cual enganchaba un trocito de choco.

Con aquel artilugio le veía inclinarse encima de alguna piedra, ofreciendo el cebo y canturreando "Jo morenita, Jo..." sortilegio mágico que hacía salir a la morena negra que entraba en aquel lazo estrangulador. Otras veces, se inclinaba metiendo una fija de hierro en la pequeña cueva y poco después le vería con un buen pulpo entre las manos; pánico me daban los tentáculos.

Yo, le seguía de cerca y despacito para no resbalar y caer encima de aquella dura alfombra de piedra, cogiendo "bulgaos" entre los charcos de agua, a una llamada suya trasponía hacía él que, paciente me esperaba con aquella especie serpentiforme entre sus manos. Una vez juntos me enseñaba la morena enroscada en si misma aun, sonriente la depositaba en un pequeño saco de tela y me decía: "no te caigas y coge los bulgaos más grandes", daba unos pasos, se detenía encima de otra piedra, "Jo Morenita... Jo..." repitiendo el mágico canto.

Ya el hombre tenía varias; esa noche habría fritura de morenas que degustaría acompañándolas de un par de vasos de ron. Al día siguiente la comida, morena frita y una semi paella con bulgaos, (yo, los odiaba).

sábado, 25 de junio de 2011

El Arte del Respeto

He leído en un blog, el post de un compañero que describe, la paz y la tranquilidad que siente en algún lugar de esta costa redonda. Un lugar que solo él conoce, disfruta, cuida y respeta.
Lejos de otros ojos que, como bien describe, no mirarían del mismo modo aquel rincón poniendo en peligro la intimidad con su compañera, su patria de paz pesquera.
Él... que acude casi de incógnito a hurtadillas al encuentro fiel y puntual, es un maestro en el Arte del Respeto al Medio.
Este arte, muy pocos la tienen y esa filosofía por desgracia, muy pocos la desarrollan y comparten. No me extraña su postura, subscribo cada linea de su manual, MPM. Solo que, por este sur, es harto difícil esconderse "Si me ven, que me vean yo, sigo con mi tarea" mientras si puedo escondo, camuflo y entierro como sea la pieza del día, si es que la logro.

Una explicación si me lo permiten de...
"CAPTURA Y SUELTA" no solo quiere decir eso mismo, tiene un significado mucho más amplio.
Significa respeto por la vida, por el entorno, por el compañero y por la naturaleza. Es decir generosidad, constancia, compromiso y dar ejemplo a los demás "pescadores".

martes, 21 de junio de 2011

Viejas estampas "El Paraíso perdido"

Néstor Alamo escribió esto para nuestra historia:
"Allá, abajo en el sur de Gran Canaria, dormida bajo el sol hay una playa"

En el año 1962, comenzó el declive en el sur de Gran Canaria. Es evidente que el paisaje ha cambiado radicalmente. La tierra madre que me pario, ha desaparecido y con ella sus hijos naturales, apartados y desheredados de aquel páramo llamado Playa del Inglés.

Nostalgia de...
Una playa... mi cuna, donde el arrorró me lo cantaban las olas y la arena rubia me protegía del frío.
Una playa... Mi reino, donde jugaba a las batallas con las olas y la espuma blanca.
Una playa... Mi refugio, las dunas, el Tarajal, el Junquillo y la amarga Aulaga.
Una playa... Mi campamento, noches de siroco y calima contra la brisa del fondo del mar.
Una Playa... Mi alma, moraba en ella y mi espíritu campaba libre.
Una Playa... Mi paraíso perdido, para siempre jamás, ¿donde está?


viernes, 17 de junio de 2011

Viejas estampas "El Chinchorro"


Releyendo el libro, "Maspalomas Antier" vi una vieja estampa, al verla, un recuerdo surge en mi memoria adulta trasladándome a un tiempo pasado.
Yo era un niño de siete u ocho años. En uno de aquellos veranos, cuyos días eran harto largos y llenos de actividad febril recuerdo que mi padre, me despertaba a las siete de la mañana, con esta frase: "ponte el bañador que nos vamos pá la playa".
Al llegar, una quincena de hombres ya estaban allí, con los hijos de Micaela, la barquera, que miraban como la falúa entraba en el mar tranquilo a golpe de remo.
Yo, mientras tanto, disfrutaba en el agua, margullando entre las olitas hasta que aquella falúa regresó a tierra.
Todos los hombres jalaban lentamente los cabos arrastrando el chinchorro, ayudándose de sus trallas, yo también ayudaba con mis manos, aportando mi esfuerzo minúsculo cual granito de arena ante aquellos gigantes barqueros. incluso algunos turistas también ayudaban con sus manos, eran los albores del boom turístico.
Ahora todos tiraban con más rapidez, aquel carrusel era divertido, significaba que ya el copo se acercaba lleno de peces, "Cierren, cierren" recuerdo que gritaba el patrón, las dos hileras de hombres se juntaron y corrían, arrastrando la red por la arena húmeda. Yo, sabía lo que estaba a punto de ocurrir, trataba de estar muy cerca del copo cuando asomase del agua, sería uno de los primeros en arrastrarlo hasta donde hiciese falta.
Cuando abrían las mallas cientos de pececitos saltaban, salpicando mi cara de arena mojada... unos estaban enredados y entre ellos había alguno grande, los hombres comenzaban a cogerlos y separarlos, yo también quería coger el pescado, pero una mano me agarró por el cuello y me sacó de aquel circulo de hombres mientras me decía: "ten cuidado, no metas las manos que te puede picar una araña" ¿que araña? yo no veo ninguna pensaba, pues no veía arañas por ninguna parte y me fui a margullar hasta que mi padre me llamase para volver a casa.


martes, 14 de junio de 2011

Momentum pescatoris est


Momentum pescatoris est.
La nueva edición de fotografías sobre Spinning en el álbum on line
http://cronicasdelaorilla.magix.net/album

Son nuestros mejores momentos, amamos este deporte y reivindicamos su filosofía.

Nocturna


Noche de casi luna llena, algo de calor y el agua con buena temperatura, las olas invitaban a lanzar los señuelos. La marea, alcanzaba ya la pleamar con un alto coeficiente, la actividad tenía que ser muy alta y Florian, que ya tenía experiencia en lides nocturnas abre la sesión, le sigo.
Tercer lance, entra una loba enmascarando su pelea con cabezazos, haciéndome creer, que se trataba de un pejerrey.
Recorrimos toda la playa, casi hasta la punta y vuelta sin más resultados que la loba solitaria.