martes, 4 de septiembre de 2012

Carta abierta, a los tres patrones

Cierto día sonó el teléfono de casa, una llamada más para los chicos, fue mi primer pensamiento. Mi mujer descolgó para contestar y me desentedí de la conversación centrandome en mí trabajo. Al poco oígo, que la llamada es para mí.

Al otro lado del teléfono se encontraba Pedro. ¡Hola chicarron! su voz tranquila me puso en guardia, pues adivinava su invitación tantas veces rechazada debido a mí trabajo. ¡No me digas que tampoco esta vez Rafa!... se lo confirmé una vez más agradecido, al mismo tiempo que maldecía mi mala suerte...a mí memoria vienen Iván y Matías, sus llamadas recientes están grabadas, con la identica expresión de Pedro al final de mi negativa. Sé que cuentan conmigo los tres patrones, ¡grande es este tercio!. Con los dos últimos he pescado y con el primero es un imposible... por ahora.

Ellos saben que desde hace más de un año el viento contrario me retiene en el varadero. Cada vez que se me ofrece una oportunidad esta, se esfuma al surgir cuando más, razones de trabajo, cuando menos cuestiones familiares o  de salud. Ya no puedo planificar salidas a corto plazo.

Añoro la proa cortando el agua, el viento y el agua salada en la cara. La charla tranquila con Matías junto a Marcus a bordo del Skorpyo. El grito de "Ay Juanramón, pegao" en el viejo Carpe Diem; (Aún no conozco tu nuevo barco Iván). Añoro entre muchas, muchas otras cosas, sensaciones  y compañías... ¡el perejil!.  Tan importante o más que el equipo de Jigguing. El antídoto que Don Antonio E.P.D. me recomendó un día a bordo de una Zodiac marinera y que, nunca me ha fallado; ellos lo saben y como a que... me refiero.

Pedro, Matías... Iván; os quiero tios, son ustedes tres grandes personas, amigos y patrones, les pido disculpas por tantos "ahora si y después no". Me encantaría salir mañana mismo a la mar con cualquiera de vosotros tres pero, no me atrevo a firmar en el rol de una promesa incierta.

 Espero paciente a que el viento role en dirección contraria y me permita hacerme a la mar con tan extraordinarios patrones y amigos.

                                      Mientras tanto, tened buena proa y buenas capturas.
 Un Abrazo